domingo, 29 de noviembre de 2009
PRESENTACIÓN
Se ha considerado que uno de los más graves errores de la educación tradicional es fomentar que los alumnos aprendan los productos finales de la investigación científica, en vez de propiciar en ellos el proceso de la investigación misma, ya que de esta manera no se les enseña a pensar, ni a ser críticos y reflexivos. Los alumnos reciben como herencia de este tipo de educación hábitos de inhibición intelectual que los hacen sumamente pasivos.
Frente a este modelo de enseñanza tradicional, algunos educadores y pedagogos postulan la alternativa de un aprendizaje activo y significativo que conduce a una enseñanza centrada en el pensamiento y que se caracteriza por la valoración inicial del conocimiento que se adquiere a través de la percepción y desde allí, el desarrollo progresivo de habilidades mentales que potencian el aprendizaje.
Es así como, en el tema sobre desarrollo del pensamiento, lo presentamos no solo desde la generalidad del tema, sino también desde la identificación de las habilidades mentales que soportan o se constituyen en el alcance mismo de una competencia.
Esperamos entonces que el tema sea de su interés y aporte a la tome de conciencia en sus procesos de aprendizaje.
EL DESARROLLO DE HABILIDADES DEL PENSAMIENTO EN EL AULA
Se destacaron las siguientes orientaciones:
En primer lugar, podemos mencionar los programas que toman como base las operaciones cognitivas. Estos programas se caracterizan por analizar las dificultades del pensamiento como una deficiencia para manejar algunos procesos cognitivos. Tratan de desarrollar y reforzar las operaciones de la comparación, la clasificación y la inferencia, porque son consideradas como operaciones esenciales para la cognición. Suponen que reforzando esas operaciones se mejorará en general la capacidad de pensar.
En segundo lugar, encontramos los programas de orientación heurística. Estos programas tratan de proporcionar a los alumnos diversas estrategias de solución de problemas que sean aplicables en diversas esferas, así como también una comprensión de las condiciones específicas bajo las cuales cada estrategia es apropiada. Se considera que la habilidad para pensar es una cuestión de "saber cómo".
En tercer lugar, encontramos los programas que corresponden al enfoque del pensamiento formal, Estos programas tienen una perspectiva piagetiana, parten del supuesto de que muchos estudiantes tienen dificultades porque no han podido avanzar del estadio pre-formal del desarrollo cognitivo. Tratan de proporcionar a los estudiantes diferentes tipos de entrenamientos y experiencias que les permitan pasar del nivel de las operaciones concretas al nivel de las operaciones formales.
Los programas que se clasifican bajo la orientación del lenguaje y manipulación de símbolos, usan el lenguaje y los sistemas simbólicos como medios para expresar los resultados del pensamiento. Se esfuerzan para mejorar la habilidad para pensar en el desarrollo de las habilidades para hablar y escribir.
Por último, podemos mencionar los programas que se clasifican bajo el rubro del pensar sobre el pensamiento, que estimulan a pensar sobre el pensamiento mismo. Hacen énfasis en que los alumnos cobren conciencia de sus propios procesos de pensamiento. Parten del supuesto de que si se comprende mejor lo que es el pensamiento, se mejorará la propia capacidad para pensar. En estos programas lo que se enseña sobre el pensamiento proviene de los campos de la filosofía, la lógica, la retórica, la psicología cognitiva, y la teoría de la decisión.
Es conveniente hacer notar que los programas mencionados anteriormente contemplan diferentes campos de aplicación, van dirigidos a alumnos con edades y capacidades académicas distintas, promueven el desarrollo de diversos tipos de habilidades para pensar, difieren en el tiempo asignado para la preparación de sus profesores y en la cantidad de tiempo empleado en clase para desarrollar sus programas respectivos.
Una característica de estos programas que es necesario resaltar se refiere a la función de los profesores, que ya no consiste en trasmitir los conocimientos o informar a los alumnos, sino en ser un orientador que fomenta la curiosidad, la investigación, la creatividad y primordialmente ayuda a los alumnos a que participen, exploren y descubran por si mismos.
LAS FASES DE EVALUACIÓN Y LAS COMPENTENCIAS COGNITIVAS
Todo sujeto tiene experiencias previas de aprendizaje en determinado campo del conocimiento o en actividades de otro orden. La función didáctica consiste en crear contextos, condiciones y ambientes para que el estudiante pueda objetivar los sentidos de sus experiencias previas y dotarlo de métodos, técnicas y herramientas que le faciliten sacar a flote esos sentidos.
PROFUNDIZACIÓN O ARGUMENTATIVO
Se refiere al conjunto de actividades previamente planificadas de manera didáctica, conducentes al dominio de conceptos y competencias de órdenes diferentes u opuestas, según los propósitos, objetivos, competencias y metas de aprendizaje establecidos en el curso académico. En esta fase se debe tener en cuenta el tipo y el conjunto de procesos mentales que se desean potenciar con la actividad bajo un contexto discursivo, situacional, axiomático, proposicional o gráfico.
TRANSFERENCIA O PROPOSITIVO
Todo conocimiento, habilidad, destreza o competencia puede permitir la transferencia de situaciones conocidas a situaciones desconocidas. Es decir, las actividades de aprendizaje planeadas en la Guía didáctica deben agregar valores de recontextualización y productividad al conocimiento que se aprende y a las competencias derivadas. En esta fase se debe objetivar en un producto escrito u oral (ensayo, proyecto, resumen, artículo, relatoría, ponencia, sistematización de experiencia).
PROCESOS MENTALES DE APRENDIZAJE INTERPRETATIVO
RECEPCIÓN, EVOCACIÓN, SÍNTESIS, RESPUESTA, ATIENDE, ESCUCHA, RECIBE, SIGUE, PREGUNTA, TOMA NOTAS, SUBRAYA, REPASA, ESTABLECE OBJETIVOS, USA AYUDAS TIPOGRÁFICAS, USA TITULOS Y SUBTITULOS, IDENTIFICA, DEFINE, DESCRIBE, TRADUCE, UBICA, LOCALIZA, CARACTERIZA, REVISA, VERIFICA, DECIDE, RELACIONA, ASOCIA, COMPARA, CONTRASTA, SECUENCIA, AUTORREGULA, AUTODETERMINA, CONCIENTE, DISCIPLINADO, COMPONE, DISEÑA, PLANEA, PROGRAMA, EXTRAE, RESUME, SUGIERE, CONNOTA.
PROCESOS MENTALES DE APRENDIZAJE ARGUMENTATIVO
CATALOGA, CONTRASTA, DESTACA, DIFERENCIA, DISTINGUE, EXAMINA, INSPECCIONA, RELACIONA, SEPARA, SUBDIVIDE, ANALIZA, EJEMPLIFICA, CUALIFICA, CONTRAPONE, CONFRONTA, DEBATE, SEMEJA, SUSTENTA, CITA, JUZGA, ESTABLECE CONDICIONES, CRITICA, TEORIZA, ESTIMA, REFLEXIONA, DEMUESTRA, EXPLICA, RESUELVE, DESARROLLA, DISCURRE, ACEPTA, ASUME, CONVOCA, COMPARA TESIS, CONTRASTA TESIS, COMPARA Y CONTRASTA AUTORES O TEORIAS, CONCLUYE.
PROCESOS MENTALES DE APRENDIZAJE PROPOSITIVO
CONCLUSIONES
En segundo lugar, que mejorar el pensamiento en el aula implica mejorar el pensamiento en el lenguaje y ello supone la necesidad de fomentar y estimular el razonamiento.
Es también importante señalar que el papel de los profesores, en los programas que desarrollan habilidades del pensamiento, consiste en ser facilitadores del aprendizaje y en convertir el aula en un proceso exploratorio. Su función más importante consiste en propiciar que los alumnos piensen y sean capaces de producir sus propios pensamientos e ideas.
Para las materias filosóficas, una manera ideal de desarrollar el pensamiento en el aula es por medio del diálogo, ya que éste genera la reflexión. Cuando se dialoga se piensa, se juzga, se indaga, los interlocutores se concentran, tienen en cuenta alternativas, escuchan al otro, tienen cuidado con las definiciones y los significados.
Finalmente, quiero señalar la trascendencia que implica para nosotros los profesores, el conocimiento de estos programas que se han dedicado a diseñar procedimientos y métodos para propiciar el desarrollo de habilidades del pensamiento en el aula, y sobre todo el poder explorar su aplicación para hacer innovaciones en la enseñanza de la filosofía en el bachillerato.
1. Leer el texto “El arte de leer”.
2. Desarrollar las preguntas que aparecen al final del texto, que tienen como fin orientarte en la construcción del sentido del texto, primera fase de interpretación y que tiene que ver con la percepción de la información. ¿Qué debo tener en cuenta para percibir (recibir) adecuadamente el texto? Con el desarrollo del taller, esperamos que puedas tener una aproximación de respuesta a este interrogante que, a su vez, se constituirá en un momento de tu autoevaluación en el proceso de aprendizaje. Ánimo!
EL ARTE DE LEER
La lectura, o el goce de los libros, ha sido considerada siempre entre los encantos de una vida culta y es respetada y envidiada por quienes se conceden rara vez ese privilegio. Es fácil comprenderlo cuando comparamos la diferencia entre la vida de un hombre que no lee y la de uno que lee. El hombre que no tiene la costumbre de leer está apresado en un mundo inmediato, con respecto al tiempo y al espacio. Su vida cae en una rutina fija; está limitado al contacto y la conversación con unos pocos amigos y conocidos, y sólo ve lo que ocurre en su vecindad inmediata. No hay forma de escapar de esa prisión. Pero en cuanto toma en sus manos un libro entra en un mundo diferente, y si el libro es bueno se ve inmediatamente en contacto con uno de los mejores conversadores del mundo. Este conversador lo conduce y lo transporta a un país diferente o una época diferente, o descarga en él algunos de sus pesares personales, o discute con él una forma especial o un aspecto de la vida de que el lector nada sabe. Un autor antiguo le pone en comunión con su espíritu muerto largo tiempo ha, y a medida que lee comienza a imaginar qué parecería ese autor antiguo y qué clase de persona sería. Tanto Mencio como Ssema Ch'ien, el más grande historiador chino, han expresado la misma idea. Poder vivir dos horas, sobre doce, en un mundo diferente, y restar los pensamientos al reclamo del presente inmediato es, claro está, un privilegio que deben envidiar las personas que están encerradas en su prisión corporal. Tal cambio de ambiente es en verdad similar a un viaje, en su efecto psicológico.
La mejor fórmula sobre el objeto de la lectura, a mi juicio, fue dada por Huang Shanku, un poeta Sung y amigo de Su Tungp'o, que dijo: "Un sabio que no ha leído nada durante tres días, siente que su conversación no tiene sabor (que se hace insípida), y su cara se hace odiosa al mirarla (en el espejo)". Lo que quiso decir es que la lectura da al hombre cierto encanto y sabor, que es el objeto de la lectura, y sólo puede llamarse arte a la lectura con este objeto. No se lee "para mejorar el espíritu", porque cuando se comienza a pensar en mejorar el espíritu o la mente, desaparece todo el placer de la lectura. Estas son las personas que se dicen: "Debo leer Shakespeare, y debo leer Sófocles, y debo leer Cervantes, para poder ser un hombre culto". Estoy seguro de que un hombre así no será culto jamás., Una noche se forzará a leer Hamlet de Shakespeare, y saldrá de ello como de un mal sueño, con el único beneficio de poder decir que ha "leído" Hamlet. Todo el que lea un libro con sentido de obligación es porque no comprende el arte de la lectura.
Este tipo de lectura con fines de negocios es igual a la lectura de los archivos y antecedentes, por un político, antes de pronunciar un discurso. Es apenas pedir consejo e información de negocios, y no leer.
Leer para cultivar el encanto personal del aspecto físico y del sabor en la palabra, es pues, según Huang, la única especie de lectura que se puede admitir. Este encanto del aspecto debe ser interpretado, evidentemente, como algo más que la belleza física. Huang no se refiere a la fealdad física en su frase. Hay caras feas que tienen un encanto fascinador y caras hermosas que son insípidas para quien las mira. Entre mis amigos chinos hay uno cuya cabeza tiene forma de una bomba y, sin embargo, verle es siempre un placer. En cuanto al sabor del discurso, todo depende de la forma de leer. Que uno tenga sabor o no cuando habla, depende de su método de lectura. Si un lector obtiene el sabor de los libros, demostrará ese sabor en sus conversaciones, y si tiene sabor en sus conversaciones no podrá menos que tener sabor en lo que escribe.
Por ende, considero el sabor, o el gusto, como la llave de toda lectura. Sigue necesariamente de ello que el gusto es selectivo e individual, como el gusto en la comida. La forma más higiénica de comer, es, al fin y al cabo, la de comer lo que gusta, porque entonces tiene uno seguridad de la digestión. Cuando se lee, como cuando se come, lo que hace bien a uno puede matar a otro.
Por lo tanto, no puede haber libros que uno debe leer. Porque nuestros intereses intelectuales crecen como un árbol o fluyen como un río. Mientras haya savia adecuada ha de crecer de algún modo el árbol, y mientras haya agua del manantial el río seguirá corriendo. Cuando el agua choca con un escollo de granito no hace más que girar a su alrededor; cuando encuentra un valle bajo y placentero se detiene y se extiende por un rato; cuando se encuentra en un hondo estanque de la montaña está contenta de quedar allí; cuando se encuentra en unos rápidos, corre adelante. Así, sin esfuerzo alguno, sin propósito determinado, llegará seguramente un día al mar. No hay en el mundo libros que se deban leer, sino solamente libros que una persona debe leer en cierto momento, en un lugar dado, dentro de circunstancias dadas y en un período dado de su vida. Llego a creer que la lectura, como el matrimonio, está determinada por el destino o autores. Aunque haya cierto libro que todos deben leer, como la Biblia, hay un momento para hacerlo. Cuando los pensamientos y la experiencia de una persona no han llegado a cierto punto para leer una obra maestra, la obra maestra sólo le dejará mal sabor en el paladar. Confucio dijo: Cuando se tienen cincuenta años se puede leer el libro de los cambios", lo que significa que no se debe leer a los cuarenta y cinco años. El sabor extremadamente suave de las frases del mismo Confucio en las Analectas, y su madura sabiduría, no pueden ser apreciados hasta que el lector ha madurado.
La lectura, pues, no es un acto simple; tiene dos caras: el autor y el lector. La ganancia neta proviene tanto de la contribución del lector, por medio de su propia visión íntima y su experiencia, como del autor mismo. Con respecto a las Analectas de Confucio, el confucianista Ch'eng Yich'uan, de la época de Sung, dijo: "Hay lectores y lectores. Algunos leen las Analectas y sienten que nada ha ocurrido; a algunos nos complace uno o dos renglones, y otros comienzan a sacudir las manos y a danzar inconscientemente."
Considero que el descubrimiento del autor favorito es para cada uno el acontecimiento más crítico en el desarrollo intelectual. Hay algo que se llama afinidad de espíritus, y entre los autores de los tiempos antiguos y modernos debe tratar uno de encontrar a aquel cuyo espíritu sea semejante al suyo. Sólo de esta manera se puede obtener algo realmente bueno de la lectura, Hay que ser independiente y buscar a los maestros. Nadie puede decir quién será el autor favorito de cada uno; quizá no lo pueda decir el mismo lector. Es como el amor a primera vista. No se puede decir al lector que ame a este o aquel autor; pero cuando ha encontrado el autor que ama, lo sabe por una especie de instinto. Conocemos casos famosos de descubrimientos de autores. Hay sabios que han vivido en edades diferentes, separados por muchos siglos, pero con modos de pensar y de sentir tan semejantes que al reunirse en las páginas de un libro parecían ser una sola persona que encontraba su propia imagen. En la fraseología china decimos de estos espíritus semejantes que son reencarnaciones de la misma alma, como se decía de Su Tungp'o que era una reencarnación de Tschuangtsé o de T'ao Yuanming1, y de Yuan Chunglang, que era una reencarnación de Su Tungp'o dijo que cuando por primera vez leyó a Tschuangtsé tuvo la sensación de que desde la niñez había estado pensando las mismas cosas y asumiendo los mismos puntos de vista. Cuando Yuan Chunglang descubrió una noche a Hsu Wench'ang, un autor contemporáneo a quien no conocía, en un librito de poemas, saltó de la cama y llamó a gritos a su amigo, y su amigo empezó a leer y gritó a su vez, y luego ambos leyeron y gritaron de tal modo que el sirviente quedó muy intrigado. George Eliot dice que su primera lectura de Rousseau fue un choque eléctrico. Nietzsche sintió lo mismo acerca de Schopenhauer, pero Schopenhauer era un maestro enojadizo y Nietzsche un discípulo de mal talante, y era natural que el alumno se rebelara más adelante contra el maestro.
Tal concepto del arte de leer destruye por completo la idea de la lectura como deber y obligación. En China, se alienta a menudo a los estudiantes a que "estudien amargamente". Hubo un famoso sabio que estudiaba amargamente y quien se clavaba un punzón en la pantorrilla cuando se dormía de noche mientras estudiaba, Hubo otro que hacía que una sirvienta estuviera a su lado mientras él estudiaba, de noche, para despertarle cada vez que se dormía. Esto es una insensatez. Si alguien tiene un libro ante los ojos y queda dormido mientras un sabio autor antiguo le está hablando, hace bien en irse a la cama. Ni el pinchazo de un punzón en la pantorrilla ni las sacudidas de la sirvienta le harán bien alguno. Un hombre así ha perdido todo sentido del placer de la lectura. Los sabios que valen algo no saben qué quiere decir "estudiar con empeño". Aman los libros y los leen porque no pueden evitarlo, nada más.
¿Qué es, pues, el verdadero arte de la lectura? La respuesta, muy sencilla, consiste en tomar un libro y leer cuando se tiene ánimo. Para gozarla cabalmente, la lectura debe ser del todo espontánea. Toma uno un volumen de Lisao o de Omar Khayyam, y se va de la mano de su amor a leer a la orilla de un río. Si hay buenas nubes en el cielo, se puede leer las nubes y olvidar los libros, o leer los libros y las nubes a la vez. A ratos, una buena pipa o una buena taza de té hace el momento más perfecto. O acaso en una noche nevosa, sentado ante el fuego, cuando canta una marmita de agua en el hogar y hay una buena bolsa de tabaco al alcance de la mano, uno reúne diez o doce libros de filosofía, economía, poesía, biografía, y los apila en el diván, y después, holgazanamente, los hojea y se enfrasca suavemente en aquel que más atrae su atención en ese momento. Chin Shengt'an considera que uno de los más grandes placeres de la vida es leer un libro prohibido tras puertas cerradas y en una noche de nieve. El ánimo para leer ha sido perfectamente descrito por Ch'en Chiju (Meikug): "La gente antigua llamaba `volúmenes suaves' a los libros y pinturas; por lo tanto, el mejor estilo para leer un libro o abrir un álbum es el estilo holgazán! Con este ánimo, se tiene paciencia para todo. Ya lo dice el mismo autor: "El verdadero maestro tolera errores de impresión cuando lee historia, tal como un buen viajero tolera los malos caminos al trepar una montaña, o quien va a contemplar la nieve tolera un puente muy frágil, o quien elige vivir en el campo tolera la gente vulgar, o quien se decida a mirar las flores tolera el mal vino."
La mejor descripción del placer de la lectura la he encontrado en la autobiografía de la más grande poetisa de China, Li Chi'ingchao (Yi-an, 1081-1141). Ella y su marido solían ir al templo, donde se vendían libros de segunda mano y copias de inscripciones en piedra, el día que él recibía su estipendio mensual como estudiante en la Academia Imperial. Entonces compraba un poco de fruta, al regreso, y una vez en casa empezaban a pelar la fruta, y a examinar juntos las otras compras, o a beber té y comparar las variaciones en ediciones diferentes. En su esbozo autobiográfico conocido como Posdata de Chinshihlu (libro sobre inscripciones en bronce y en piedra), la poetisa dice:
Yo tengo mucha memoria y, sentados a solas después de comer en el Salón del Regreso a Casa, solíamos hacer un pote de té y, señalando a las pilas de libros en los estantes, decíamos en qué línea de qué página de qué volumen de cierta obra se presentaba un pasaje determinado, para ver quién acertaba, y el que ganaba tenía el privilegio de beber primero su taza de té. Cuando uno de los dos adivinaba, alzábamos muy alto la taza y rompíamos en carcajadas, tanto que a veces se derramaba el té sobre nuestros vestidos y no lo podíamos beber. ¡Qué contentos estábamos de vivir y envejecer en un mundo así! Por eso teníamos alta la cabeza, aunque vivíamos en la pobreza y el pesar... Con el tiempo nuestra colección aumentó, y los libros y objetos de arte se apilaron en mesas y escritorios y camas, y los gozábamos con los ojos y con la mente, y proyectábamos y discutíamos sobre ello, saboreando una felicidad muy superior a quienes gozan de los perros y los caballos y la música y las danzas...
Li escribió esto en sus últimos años, muerto ya su marido, cuando era una anciana solitaria que huía de un lugar a otro, durante la invasión del Norte de China por las tribus Chin.
Tomado de:
TALLER
Desarrollemos habilidades para la percepción del texto “El arte de leer”
1. El propósito principal de este artículo es _____________________.
(Exprese con la mayor exactitud el propósito posible que tuvo el autor para escribir el artículo.)
2. La pregunta clave que el autor trata de contestar es _____________.
(Delimite la pregunta clave que el autor pensó al escribir el artículo.)
3. La información más importante en este artículo es _____________.
(Defina los hechos, experiencias y datos que usa el autor para apoyar sus conclusiones.)
4. Las inferencias/conclusiones de este artículo son _____________.
(Identifique las conclusiones principales a las que el autor llega y que presenta en el artículo.)
5. Los conceptos claves que se necesitan entender en este artículo son ___________. Lo que el autor quiere decir con estos conceptos es ___________. (Describa las ideas más importantes que uno debe comprender para entender el razonamiento del autor.)
6. Los supuestos de los que parte el autor son ___________.
(Identifique aquello que el autor da por hecho [y que puede cuestionarse]).
7. a. Las implicaciones que habría que afrontar si se toma en serio el planteamiento son _____________. (¿Qué consecuencias son probables que se desprendan de considerarse el planteamiento del autor?)
b. Las implicaciones que habría que afrontar si no se toma en serio el planteamiento son _________________. (¿Qué consecuencias son probables que se desprendan de ignorarse el planteamiento del autor?)
8. Los puntos de vista principales que se presentan en este artículo son_____________. (¿Desde qué perspectiva contempla el autor la situación presentada?
VISITA NUESTRO VIDEO SÍNTESIS SOBRE EL DESARROLLO DEL PENSAMIENTO
http://www.youtube.com/watch?v=k7Q2DxXh2_E
BIBLIOGRAFÍA
Universidad Nacional Abierta y a Distancia (2009). Pedagogías del aprendizaje autónomo, protocolo. Bogotá D.C. Pedro Antonio Vela González
Universidad Nacional Abierta y a Distancia (2009). Pedagogías del aprendizaje autónomo, Módulo. Bogotá D.C. Pedro Antonio Vela González